CRUCE DE LOS ANDES A CABALLO HASTA EL LIMITE DE CHILE
Llevando la hacienda junto a los baqueanos en el Cruce de los Andes a caballo, oímos cada relato y cada vivencia, que década tras década le dio forma a la rica historia de este lugar.
Hoy decidimos compartirlo y volver a disfrutarlo, ofreciendo a nuestros turistas, amigos y amigas, vivencias inolvidables en el imponente marco de la Cordillera de los Andes. Una travesía a la par de los baqueanos y sus costumbres. El equilibrio justo entre descanso y relajación, con mucho de acción y aventura.
Historia del Cruce de los Andes a caballo
Por el Paso del Portillo cruzó el Capitán Lemos en 1817 y, años después, regresó San Martín al finalizar la gesta libertadora en 1823. Históricamente fue usado por los Huarpes, Araucanos, Jesuitas, Baqueanos y Criollos. Hasta el mismo Darwin lo utilizó para sus estudios antropológicos. Cruzando el Portillo nos encontramos con el Alto Valle del Tunuyán, un lugar donde antiguamente pastaba el ganado en los meses del verano. Por los años 50 y hasta los 80, mi padre llevaba por veranada casi dos mil cabezas para engorde y nosotros, sus hijos, lo acompañábamos en esta hermosa y ardua tarea. Durante el último tiempo esta zona se ha transformado y actualmente la actividad que realizamos es la de turismo de montaña, con cabalgatas que comienzan en enero y terminan a mediados de abril.
Los invitamos a esta aventura, donde viviremos como lo hacían nuestros gauchos, recorriendo las tierras por donde arriaban la hacienda, y disfrutando las comidas típicas de la Cordillera.